22 de noviembre de 2015

La degeneración del diario «El País»

Hubo un tiempo en que el diario «El País» era un referente informativo en España, tanto por su fondo e integridad —no es en principio cometido de este espacio ocuparse de esos extremos, pero resulta más que evidente a qué abominable estado han llegado— como por sus formas impecables, que constituían una guía segura y completamente fiable.

Hubo un tiempo, sí. Pero ya no: en la actualidad la situación es bien distinta, como ha quedado patente con el editorial de hoy, domingo 22 de noviembre de 2015, en el que se ha colado una construcción incorrecta y ajena por completo al genio natural de nuestro idioma.



Si grave nos parece que una barbaridad como la señalada en la imagen anterior se haya colado en un tuit de la cuenta oficial de un diario como «El País», se nos antoja imperdonable que ese mismo dislate figure en el último párrafo del cuerpo del editorial:



Significa «rehusar», según consta en la edición más reciente del DLE que publica la RAE, «no querer o no aceptar algo», pero de ningún modo significa «negar» ni «privar», y tampoco puede construirse con su mismo régimen.



Nos resulta inconcebible que un error tan grueso (aparentemente un galicismo: «refuse aux Espagnols») se cuele en una pieza de la relevancia de un editorial de un diario de la difusión nacional e internacional de «El País», por favor, que no estamos hablando de la hoja parroquial de Mosén Millán, hombre...

Revela este disparate no solo impericia y desconocimiento del idioma en unos profesionales de la palabra, sino también una falta total de atención, reflexión y espíritu crítico. ¿Cuántos ojos de la redacción de «El País» habrán visto ese editorial antes de su publicación? ¿Cómo es posible que absolutamente a nadie le hayan saltado las alarmas al leer ese desatino? ¿Y cómo puede ser que en el momento de publicar estas líneas ahí siga, en la edición digital, a la vista de todo el mundo, sin que nadie haya tenido el amor propio y la profesionalidad de corregirlo?

Según recoge el «Libro de estilo» de este diario en su sección 7, punto 2.79, los editoriales son responsabilidad del director:


Es el director en esta fecha Antonio Caño. Ni él ni nadie de su diario se han dignado a dar explicación de tan grave error gramatical y se ha limitado a retuitear con su cuenta personal dos de nuestras quejas, retuits que, a falta de otras manifestaciones, tomamos como asunción y reconocimiento del error por su parte.



Así está el patio... ortográfico

1 comentario:

  1. Creo que, a pesar de esos errores, por otro lado tan frecuentes en los demás medios, 'El País' es el único que no solo cuida el lenguaje, sino que todas las semanas se hace eco de las correcciones de sus lectores.

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